146. Romario
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Con trabajo duro y determinación, Romário pudo desarrollarse bastante rápido como jugador y saltó a la fama cuando anotó 4 goles en un partido contra el Vasco da Gama. Como resultado, la dirección del equipo perdedor le ofreció un contrato en 1985.
En el nivel juvenil, Romário se desempeñó muy bien con el Vasco da Gama. Logró ganar un par de títulos para el equipo y luego fue seleccionado para formar parte de la selección brasileña. Tuvo la suerte de representar a su país en los Juegos Olímpicos de Seúl de 1988 y se convirtió en el máximo goleador del torneo. El equipo de Romários logró asegurar una medalla de plata. Después de solo dos años, Romário volvió a ser fundamental para que su equipo lograra el Copa América título ya que consiguió marcar el gol de la victoria en la final.
Después de su asombrosa actuación con la selección brasileña, Romário fue asegurado por el gigantesco club holandés PSV Eindhoven en 1988. Es durante su estadía en Holanda cuando Romário entra en el círculo completo. Durante sus cinco años en el club, Romário anotó la friolera de 125 goles y llevó a su club a un campeonato de Copa y tres títulos de liga.
Durante la final de la Copa del Mundo de 1990 celebrada en Italia, Romário solo pudo jugar un papel menor en la competencia debido a su mala forma física después de recuperarse de una fractura en la pierna. Pero Romário se redimió cuatro años después en el Copa del Mundo de Estados Unidos, donde anotó cinco goles y podría decirse que fue la estrella más grande del torneo en el que Brasil consiguió su cuarto título mundialista. En retrospectiva, Romário era una de las principales figuras de la selección brasileña, pero no estaba lejos de pasar desapercibido por un cisma con el técnico Parreira.
El mundo pudo presenciar las delicadezas de Romário. Su dominio del balón y su habilidad con una fisonomía y movimiento corporal a lo Maradona asombran. Tenía una manera fluida de pasar a través de un defensor con el pie derecho haciendo rodar la pelota a la izquierda de la dirección de su cuerpo. En comparación con otro delantero sudamericano, Gabriel Batistuta, Romário no estaba usando mucho poder para anotar, sino que rodaba el balón con un toque ligero.
Tras su paso por el PSV Eindhoven, Romário dio el salto al Fútbol español el poderoso FC Barcelona en 1993. A pesar de todos los grandes nombres del club, logró convertirse en una parte integral del equipo, que más tarde se conoció como el "'Dream Team". Romário fue un goleador imprescindible durante su paso por el club. Logró anotar 46 goles en 34 apariciones y ayudó al Barcelona a hacerse con un título de liga. Después de dos años, Romário y el club se separaron.
En 1995, Romário se mudó al Club Flamengo brasileño. Durante su estancia de cinco años en el club, tuvo dos etapas bastante infructuosas en España con el FC Valencia. Sin embargo, las cosas eran un poco diferentes en casa. Dos años después de fichar por el club, Romário una vez más ayudó a Brasil a asegurar otro título de la Copa América al formar una fuerza de ataque letal con su compañero de equipo Ronaldo. Desafortunadamente, al año siguiente, Romário no fue seleccionado para la selección nacional con destino al Mundial de Francia debido a que no estaba apto para jugar.
En el año 2000, Romário se mudó al club brasileño Vasco da Game, donde todo comenzó para él y logró llevarlos al título de la liga brasileña y la 'Copa Merscour'. Romário anotó 41 goles en apenas 46 partidos con el club. Más tarde, Romário se fue al Fluminense y después de eso, un breve e infeliz paso por Qatar en el Al Sadd.
En 2005, Romário dejó el Al Sadd y regresó al Vasco Da Gama, donde junto a Edmundo encarnarían una emocionante sociedad. Romário logró anotar 22 goles durante la temporada y convertirse en el máximo goleador. Más tarde, tuvo una breve etapa en Miami FC y también jugó algunos partidos para el equipo australiano Adelaide United FC.
Romário se desempeñó como jugador-entrenador de su antiguo club Vasco da Game, pero fue despedido un tiempo después debido a desacuerdos con la dirección del club. También dio positivo por una sustancia prohibida que puso fin a su carrera como jugador.
A lo largo de su carrera, Romário ganó numerosos premios, uno de los más notables fue el 'FIFA Player of Year Silver Award' que obtuvo en 1994.
Romário se casó con Isabelle Bittencourt en 2002 y tienen dos hijos, Isabellinha y Romarinho Faria.
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